Fotulis y fotelis

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domingo, 27 de mayo de 2012

La vida sin apendice

Ya pasaron 3 semanas de mi cirugia. Pasé días malos, con mucho dolor, mucha debilidad, muchos temores. Tuve suerte de estar muy mimada por mi familia, más que nada por mi mamá, que se encargó de cocinarme lo que se me antojaba comer, dentro de mis limitaciones ( Soy vegetariana ovo lactea, no consumo grasas, ni frituras, ni lacteos enteros), e incluso obligandome a comer cosas que necesitaba para mi recuperacion (Pollo y morcilla, ya que mi anemia estaba por el subsuelo, me sentia muy debil, con falta de aliento). En estos dias mi familia me llenó la heladera de gelatinas, flancitos, queso crema, yogures y agua mineral sin gas. Mi hijo, por su parte, me ayudó a levantarme, a caminar (Devolvimos gentilezas, yo le enseñé a caminar, y 9 años después, él me ayudó a caminar a mi), me hizo tecitos para desayunar y merendar. Fisicamente, estoy genial, los puntos ni se notan (El drenaje cicatrizó genial, ni se nota que mi tattoo fue arponeado, los puntos del ombligo apenas joden, y el punto de la pelvis parece una manchita que con el tiempo ni se verá), los moretones de los sueros infiltrados ya no están más, ya no me duelen las muñecas (Aunque quedaron minusculas, tengo menos circunferencia de muñecas que mi hijo de 9 años!). Lo unico que hace notar que pasé por esta peritonitis, es la delgadez. Se nota en mis piernas, mi cadera, los huesos de la pelvis, mis brazos, mi cuello, mis claviculas, bah! en todos lados, menos en la panza, que obviamente está inflamada. El medico dice que a pesar de tener hecha una palaroscopia, por dentro es cirugia tradicional, me estuvieron manoseando las tripas (Puaj!) y obviamente voy a estar inflamada unos cuantos dias más. En fin. Ahora solo resta ir sanando la mente, ya que la experiencia me dejó muy sensible, temerosa, ansiosa, demasiado atenta a todo dolor, y no está bueno. Excusa más que justificada para hacer terapia, que nunca viene mal. Está bueno contarle tus cosas mas secretas a alguien que no va a juzgarte. Adoro hacer terapia y no veo la hora de arrancar nuevamente! Punto aparte para May y Flor, que estuvieron pendientes de cada paso de mi recuperacion. En momentos asi te das cuenta quienes son amigos y quienes son egoistas. Y junto a ellas, hubo mucha gente que me asombró por su preocupacion. Fueron muchisimos mimos!!